La colección es una oda, pero también una invitación para redescubrir el mundo desde la perspectiva de la infancia. Peces superpuestos, osos polares en medio del verano, paisajes imaginarios, pingüinos juguetones, animales haciendo fotos a sí mismos, la perfección de los deportes de invierno en Aspen, nadando a 2000 m de altitud, bocetos de estilo delicado y mucho más. Sea cual sea la época del año, en la playa o en la montaña, Vilebrequin nos sumerge en las vacaciones. En esta colección, la realidad se entremezcla a menudo con el humor y la poesía, mientras que los sueños se funden con los recuerdos de las vacaciones en familia.
Cada detalle añade un toque diferente: estampados coloridos, fotos y gráficos entremezclados, efectos ópticos, un espíritu travieso y juguetón, el arte de sorprender, como si se tratara del juego del escondite.
La temporada primavera-verano 2016 de Vilebrequin nos lanza a la búsqueda de nuevas aventuras, con un estado de plena felicidad, despreocupación y vacacional.
Desde hace 40 años, Vilebrequin se esfuerza por conciliar estilo y diversión permaneciendo fiel a sus orígenes en St-Tropez. Resistentes e intemporales, los bañadores de Vilebrequin llevan varias décadas vistiendo a generaciones de padres e hijos a la búsqueda de lo mejor.